Qué es la salud menstrual y por qué es importante conocer acerca de ella fueron algunas de las preguntas analizadas y resueltas por expertas durante el conversatorio “Riesgos relacionados con la salud menstrual”, organizado por las Personas Orientadoras Comunitarias (POC’s), la Comisión Interna de Igualdad de Género de la FES Zaragoza, y como parte de los acuerdos establecidos en conjunto con la colectiva MorraZ.
En este conversatorio, realizado en el Foro Cultural del Campus I, participaron la ingeniera biomédica Delia Oliva Cantarutti, vicepresidenta del Colegio de Ingenieros Biomédicos de México, así como las químicas farmacéuticas biólogas Karla Michel Peredo Gómez y Jessica Cuevas Jacinto, coordinadora y farmacovigilante, respectivamente, del Centro Institucional de Farmacovigilancia del Instituto Nacional de Cardiología Dr. Ignacio Chávez, moderadas por las doctoras Elizabeth Guadalupe Sánchez González y María de los Ángeles Martínez Suárez, POC’s y académicas de las carreras de Química Farmacéutica Biológica y Psicología, respectivamente.
La doctora Martínez Suárez indicó que este conversatorio surgió de una jornada de salud de higiene menstrual y tiene propósito de visibilizar y concientizar sobre la importancia que tiene la salud menstrual y todo lo relacionado con ésta, como la salud reproductiva, prevención de enfermedades, el bienestar emocional, la comodidad física y el conocimiento del propio cuerpo.
“La salud menstrual es un tema social de las mujeres. La menstruación es parte de la vida de la mujer y exige calidad de vida, no es una enfermedad, es preciso cambiar varios paradigmas entorno a ella”, consideró la ingeniera biomédica Cantarutti, también especialista en control sanitario de la Cofepris.
Se abordó cómo la mujer puede identificar en qué momento una molestia menstrual puede ser normal o no.
Al respecto, la química farmacéutica bióloga Cuevas Jacinto señaló que cuando la mujer ha llegado a una etapa adulta y las molestias suelen impedir desarrollar de manera normal de sus actividades, es fundamental no dejar de lado las molestias y consultar a los profesionales de la salud.
Por su parte, la doctora Sánchez González, hizo énfasis en que una persona menstruante debe reconocerse como única, “no es posible comparar el caso personal o la experiencia, ni la terapia de una mujer con respecto a otras. No porque a una mujer le indiquen un anticonceptivo quiere decir que sea aplicable a todas”.
La química farmacéutica bióloga Peredo Gómez destacó que una vez que se esté consumiendo un medicamento para las molestias menstruales es responsabilidad de quien lo consume informarse de la utilidad que posee “y saber cuáles pueden ser las posibles reacciones adversas”.
Finalmente, sobre la viabilidad del uso de máquinas expendedoras de toallas sanitarias, las expertas sugirieron su uso sólo en caso de emergencia y verificar si en la máquina existe polvo, humedad u otro tipo de contaminación, ya que estos factores deterioran estos insumos.
