Con el objetivo de instruir sobre el manejo correcto del gas en los hogares para evitar accidentes o situaciones de emergencia, elementos del Heroico Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de México impartieron un taller de manera híbrida para la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza en el Centro de Tecnologías para el Aprendizaje (CETA), y a través de Zoom y Facebook.
En representación del director de la Facultad, doctor Vicente Jesús Hernández Abad, el secretario de Desarrollo Académico, doctor José Luis Alfredo Mora Guevara, agradeció la presencia de los bomberos, licenciados José René Rodríguez Pedrero y José de Jesús Santiago Chávez.
El doctor Mora recordó que el H. Cuerpo de Bomberos nació en la época de la colonia y desde entonces auxilia a la población. Indicó que es importante saber cómo actuar en el caso de una fuga de gas para evitar complicaciones. “En breve, se firmará un convenio de colaboración entre la FESZ y el H. Cuerpo de Bomberos para dar certidumbre a estos eventos de capacitación”, dijo.
El bombero Santiago Chávez abordó las diferencias entre el gas Licuado de Petróleo (LP) y el natural. Explicó que el LP tiene una gran aceptación para usarse en hogares, comercios e industrias por su amplia facilidad para ser manejado, almacenado y consumido.
En tanto, el gas natural es un combustible fósil, incoloro, no tóxico; representa beneficios frente a otros porque es más limpio, más eficiente y más económico.
Señaló que aunque el gas LP no es tóxico, es un asfixiante simple, y causará síntomas como taquipnea, taquicardia, mareo, pérdida de conocimiento y finalmente la muerte en caso de una fuga. El gas LP es frío, por ello es necesario usar el material adecuado, como mangueras de neopreno o flexibles trenzadas.
Por su parte, el bombero Rodríguez Pedrero informó que para que un cilindro de gas explote, debe estar expuesto al calor, sufrir un fuerte golpe, que haya un error en su llenado en la planta.
En caso de una fuga de gas se recomienda, en caso de ser posible, sacar el cilindro a un lugar más amplio, y al aire libre; cerrar la válvula de servicio y ventilar. Las fugas más comunes son el picado de fondo de tanque o en los cordones de soldadura y en la válvula de suministro. Se recomienda usar una jerga mojada, o una mezcla de jabón con azúcar para hacer un taponeo. No obstante, siempre es recomendable llamar a los bomberos.


